El nuevo censo: cuántos latinos hay en Canadá, de dónde vienen, cómo llegan, dónde viven…

La comunidad latina en Canadá sigue creciendo de forma considerable, pero cada vez lo hace a un ritmo más lento, según reflejan los datos del nuevo censo oficial. La macroencuesta, recién publicada, y considerada la más completa de la historia del país, revela que el número de latinoamericanos que viven en Canadá se acerca ya al medio millón, el 1,3% de la población total canadiense.

El 16% de los latinos en Canadá son menores de 14 años, y  el 14% tienen entre 15 y 24. Foto: CC0 Public Domain

Según el nuevo censo oficial de Canadá, recién publicado, en 2016 residían en el país un total de 447.320 personas que se identifican a sí mismas como «latinoamericanos», frente a las 381.280 registradas en la última encuesta, del año 2011. Este dato supone un incremento del 17,3% entre 2011 y 2016, frente al crecimiento del 25,3% detectado entre 2006 y 2011, y certifica la tendencia a la baja iniciada a mediados de la pasada década, tras la gran subida del 40,2% que se produjo entre 2001 y 2006, un porcentaje que casi duplicó el incremento del 22,6% contabilizado entre 1996 y 2001.

En resumen: la comunidad latina en Canadá sigue creciendo de forma considerable, pero cada vez lo hace a un ritmo más lento.

Pasada ya la gran oleada migratoria de finales del siglo pasado —y, especialmente, la de los años setenta, cuando cerca del 18% de los recién llegados a Canadá eran de origen latinoamericano—, y a pesar del fuerte empuje debido al TLCAN (el tratado de libre comercio entre Canadá, México y Estados Unidos), los datos reflejan que el número de latinoamericanos que llegan cada año a Canadá va descendiendo ligeramente.

[perfectpullquote align=»left» cite=»» link=»» color=»» class=»» size=»»]En 2016 residían en Canadá 447.320 latinoamericanos, frente a los 381.280 contabilizados en 2011[/perfectpullquote]

Lejos parecen quedar ya las destacadas cifras que originaron en su día las migraciones de cubanos opuestos al castrismo, de chilenos escapando de la dictadura de Pinochet, de salvadoreños dejando atrás la guerra civil, de colombianos poniéndose a salvo de la violencia originada por el conflicto con las FARC, o, más recientemente, de mexicanos huyendo de la brutalidad del narcotráfico y la ‘guerra contra las drogas’.

En cualquier caso, no hay que descartar que esta tendencia a la baja en el crecimiento de la inmigración latina se invierta en los próximos años, de continuar las restricciones migratorias que tiene en su agenda el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, unas restricciones que pueden llevar a muchos latinoamericanos, especialmente de México, a elegir Canadá como destino en lugar del vecino del sur.

De hecho, el número de mexicanos que solicita refugio en Canadá está creciendo de forma importante, según los datos facilitados por la Comisión de Inmigración y Refugio de Canadá (IRBC). En el primer semestre de este año, el número de peticionarios de origen mexicano ya dobló el registrado en todo 2016, que fue de 257. Solo en la primera mitad de 2017 un total de 566 mexicanos pidieron asilo en Canadá.

Minoría visible

Los latinos, la mayoría de los cuales emigran actualmente a Canadá por motivos de carácter fundamentalmente económico, representan ahora en torno al 1,3% de la población total canadiense. En 2011 eran el 1,2%, y en 2006, el 1%.

De estos 447.320 identificados como latinoamericanos, 348.340 son primera generación de inmigrantes (nacidos fuera de Canadá y que emigraron al país en algún momento de sus vidas); 95.125, segunda generación (hijos de inmigrantes); y 3.860, tercera generación o posterior (nacidos en Canadá de padre y madre nacidos también en Canadá).

Atendiendo a los criterios empleados por Estadísticas Canadá para la categorización por los grupos de población que incluyen a las denominadas minorías visibles, entre 2006 y 2016 la población de origen latinoamericano en Canadá creció en aproximadamente un 48%, lo que supone el sexto mayor incremento de entre estas minorías.

La legislación canadiense define «minorías visibles» como aquellos colectivos, excepto los pueblos aborígenes, que son «de raza no caucásica o de color no blanco», e incluye en ellas, entre otras, las categorías de «chinos», «negros», «filipinos», «latinoamericanos», «árabes», «del sudeste asiático», «de Asia Occidental», «coreanos» y «japoneses».

Categorizada de esta manera, a lo largo de la última década la comunidad latina ha crecido más que la coreana, la china, o la del sudeste asiático, pero bastante menos que la árabe, que casi se ha duplicado, y la filipina, y algo menos que la de Asia Occidental, la negra (afrocanadiense), o la de Asia del Sur.

Hispanoablantes, jóvenes, mujeres

Agrupados por idioma, el número total de hispanohablantes en Canadá es de 495.090. De ellos, 453.530 tienen además el español como lengua materna. El dato no incluye, obviamente, a los latinoamericanos que hablan otro idioma (los procedentes de Brasil, pero también los de Haití o Guyana, por ejemplo), pero sí, en cambio, a los españoles (un total de 10.695 en Canadá) y a otros hispanohablantes no latinoamericanos.

El porcentaje de hispanohablantes en Canadá sobre la población total del país, un 1,4%, es, por tanto, ligeramente superior al de latinoamericanos. Con respecto al conjunto de «lenguas inmigrantes», el español lo habla un 6,4% de los que hablan un idioma que no es ni el inglés ni el francés ni una lengua aborigen. Esto sitúa al español en la quinta posición en esta categoría, por detras del mandarín (7,9%), el cantonés (7,7%), el punjabi (7%), y el tagalo o filipino (6,6%), y por delante del árabe (6,3%), el italiano (5,3%), el alemán (5,2%), o el portugués (3,1%).

Idiomas maternos de los inmigrantes en Canadá. En rojo, los hispanohablantes. Fuente: Statistics Canada, 2016 Census – Proportion of mother tongue in Canada.

Divididos por generaciones, en 2016 había un total de 379.355 hispanohablantes de primera generación con el español como lengua materna; 71.860 de segunda generación; y 2.315 de tercera generación o posterior.

En cuanto a las edades, la comunidad latinoamericana en Canadá es relativamente joven. De los 447.320 que se definen como latinos, 70.870 (el 16%) son menores de 14 años; 63.580 (el 14%) tienen entre 15 y 24; 238.930, entre 25 y 54 (de ellos, 81.375, entre 25 y 34; 89.640, entre 35 y 44; y 67.915, entre 45 y 54); 43.435, entre 55 y 64; y 30.500, más de 65. Es decir, 305.465 (más del 68%) tienen menos de 44 años, siendo el grupo mayoritario el de edades comprendidas entre los 35 y los 44 años.

Por sexos, el número de mujeres (231.865) aventaja ligeramente al de hombres (215.460).

Mexicanos, colombianos, salvadoreños

Con respecto al país de procedencia, y según los datos del censo correspondientes a la población inmigrante de acuerdo a su lugar de nacimiento, el principal origen de los inmigrantes latinoamericanos en Canadá sigue siendo México, seguido de Colombia y, a mayor distancia, El Salvador, Perú, Chile, Venezuela y Argentina.

En Canadá residen actualmente un total de 80.585 inmigrantes nacidos en México (frente a los 69.695 de 2011), 70.035 nacidos en Colombia (60.555 en 2011), 48.075 en El Salvador (43.655 en 2011), 29.620 procedentes de Perú (26.715 en 2011), 26.705 de Chile (25.195 en 2011), 20.775 de Venezuela (16.005 en 2011), y 19.425 de Argentina (18.870 en 2011).

Frente a los incrementos registrados en el número de inmigrantes procedentes de los países tradicionalmente con más presencia en Canadá (un 15% más en el caso de los mexicanos, otro 15% en el de los colombianos, un 10% en el de los salvadoreños), llama la atención la subida experimentada por el colectivo de venezolanos, del 30%, un hecho probablemente atribuible a la inestabilidad política y la crisis existente en el país sudamericano.

Trabajo, familia, refugio

La siguiente tabla muestra los datos correspondientes a la categoría por la que fueron admitidos en Canadá los inmigrantes de los países latinoamericanos con una mayor presencia en el país (no incluye el apartado «otros» ni el de los llegados antes de 1980).

Como puede observarse en la tabla, la mayoría de los mexicanos, chilenos y venezolanos llegaron a Canadá patrocinados por familiares, mientras que los colombianos y los salvadoreños lo hicieron sobre todo como refugiados. Los peruanos y argentinos entraron en Canadá, principalmente, a través de programas de trabajo.

La suma total de la población latina en esta categoría, denominada «Población inmigrate», y que incluye a los procedentes de México, América Central y Sudamérica (con Brasil, Guyana y otros países no hispanohablantes), pero excluye a los del Caribe, es de 490.345 personas. Esta cifra es algo distinta al dato global recogido en el apartado de «Minorías visibles» correspondiente a «Latinoamérica» (los mencionados 447.320), debido a que se trata de una distinción más geográfica que identitaria, y también por la disparidad de criterios a la hora de incluir o no a determinados países del Caribe, así como por otras diferenciaciones correspondientes al estatus migratorio en sí.

Sumando los inmigrantes de los dos países hispanohablantes del Caribe, Cuba (17.850) y la República Dominicana (10.605), y contando asimismo tanto a los que tienen el español como lengua materna como a los que no, el número total de latinoamericanos en Canadá superaría el medio millón, en concreto, 518.800.

La gran mayoría de los latinoamericanos en Canadá residen en Ontario (251.875), provincia a la que sigue Quebec (110.595), y Alberta (56.535). En general, los latinos se siguen concentrando especialmente en las grandes áreas metropolitanas de Toronto, Montreal y, en menor medida, Vancouver, Calgary y Ottawa, con un crecimiento destacado en las provincias de Alberta, Manitoba y Nueva Escocia.

Inmigrantes en Canadá en 2016, según su lugar de nacimiento y su lugar de residencia en Canadá. En rojo, en el gráfico de la izquierda, los procedentes de Latinoamérica, el Caribe y EEUU. Fuente: Statistics Canada, 2016 Census – Immigrant population by selected places of birth, places of residence, admission category, and period of immigration.

Récord de inmigrantes

Más allá de la comunidad latinoamericana, el nuevo censo de Canadá, publicado por Statistics Canada el pasado miércoles, revela que casi el 22% (un 21,9%) de los canadienses son inmigrantes, lo que supone el mayor porcentaje en 85 años. Según las proyecciones de StatCan, este porcentaje puede llegar a entre un 25% y un 30% para el año 2036.

El censo refleja asimismo un importante crecimiento en el número de canadienses que se identifican como miembros de minorías visibles, y en el de quienes lo hacen como aborígenes, o pertenecientes a pueblos indígenas.

La macroencuesta se ha centrado esta vez en destacar los datos de población relacionados con la inmigración, la diversidad etnocultural, la vivienda y los pueblos indígenas. A continuación, otros datos clave:

  • El censo contabiliza 1,67 millones de indígenas en Canadá en 2016, el 4,9% del total de la población, frente al 3,8% en 2006, y con una tasa de crecimiento del 42,5% a lo largo de los últimos 10 años.
  • Un total de 979.230 personas se identifican como pertenecientes a las Primeras Naciones, un 39,3% más que en 2006. Los métis suman 587.545 (un 51,2% más en ese mismo periodo), y los inuit, 65.025 (29,1% más).
  • De los 1,2 millones de nuevos inmigrantes que se establecieron permanentemente en Canadá entre 2011 y 2016 (el 3,5% del total de la población canadiense el año pasado), el 60% entraron en el país bajo permisos económicos, el 26,8% por motivos familiares (ya tenían parientes en Canadá), y el 11,6% como refugiados. Durante los primeros cuatro meses de 2016, los refugiados supusieron el 25% del total de inmigrantes admitidos en Canadá, debido a la llegada de los refugiados sirios.
  • Asia, incluyendo Oriente Medio, sigue siendo la región de la que procede el mayor número de inmigrantes (61,8%), seguida de África (13,4%), y Europa (11,6%, cuando en 1971 era la región dominante, con un 61,6%).
  • Cerca de 1,9 millones declararon ser de origen surasiático, lo que supone un cuarto de toda la población perteneciente a las llamadas minorías visibles. El segundo grupo son los chinos, con 1,6 millones, el 20,5% de las minorías visibles, seguidos de los negros, que pasan la barrera del millón por primera vez, con 1,2 millones, el 15,6%. En el quinto lugar aparecen filipinos y árabes.
  • En cuanto a cómo han evolucionado estos grupos entre 2006 y 2016, el mayor incremento se ha producido entre la población de origen árabe, que casi se ha duplicado (97,5%), seguida por los filipinos (89,5%), asiáticos occidentales Oriente Próximo y Medio (69%), negros (51,9%), asiáticos del sur India, Pakistan, Bangladesh… (51,7%), latinoamericanos incluyendo el Caribe (48,4%), coreanos (30,5%), chinos (29%), asiáticos del sudeste Vietnam., Camboya, Laos… (26,8%), y bancos y aborígenes (2,5%).
  • En más de 9,5 millones del total de 14.1 millones de hogares de Canadá la vivienda se posee en propiedad, lo que supone un 67,8%, algo menos que el 69% registrado 2011. Este procentaje varía mucho dependiendo de la edad: el 70% de los propietarios de viviendas en 2016 tenían entre 35 y 54 años, mientras que en el segmento de entre 20 y 34 años el porcentaje baja al 43,6%.

El mejor censo de la historia

El Censo de Canadá de 2016 es la enumeración detallada de la población canadiense a partir del mes de mayo de ese año. Se trata del séptimo censo quinquenal realizado en el país, y su elaboración ha marcado el restablecimiento del censo obligatorio de forma larga, que se había dejado de realizar en favor de la Encuesta Nacional de Hogares (en inglés, National Household Survey) del censo de 2011. Por su tasa de respuesta, un 98.4%, el censo de 2016 es considerado el más completo y representativo de la historia (la primera encuesta de población se llevó a cabo en el año 1666, en los territorios de la entonces Nueva Francia).

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Miguel Máiquez
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Journalist, Lattin Magazine editorial board member, and former web editor at the Spanish newspaper 20 Minutos, where he also served as Chief Editor and contributed in-depth analysis of mainly international current affairs. He started his career —more than 25 years working as a journalist, editor and writer— at La Opinión de Murcia, and has also worked, among other media, at the Canadian newspaper El Popular. He runs a blog about the Middle East, and another blog with fiction stories. He is also a translator and a Spanish language teacher. In Toronto since 2007, he colaborates as a media advisor with several organizations in the Latin American community.