El Día Mundial de Concientización sobre el Abuso de Personas Mayores (WEAAD) se conmemora cada año el 15 de junio para destacar una de las peores manifestaciones de discriminación por edad y desigualdad en nuestra sociedad, el abuso de personas mayores.
El abuso de personas mayores es cualquier acto (o falta de él) que cause daño a una persona mayor y lo lleva a cabo alguien a quien conocen y en quien confían, como un familiar o un amigo. El abuso puede ser físico, social, financiero, psicológico o sexual y puede incluir maltrato y muchas veces negligencia.
WEAAD fue reconocido oficialmente por la Asamblea General de las Naciones Unidas en diciembre de 2011, a raíz de una solicitud de la Red Internacional para la Prevención del Abuso de Ancianos (INPEA), que estableció por primera vez la conmemoración en junio de 2006.
En muchas partes del mundo, el abuso de personas mayores ocurre con muy poco reconocimiento y/o respuesta. Es un problema social global que afecta la salud, el bienestar, la independencia y los derechos humanos de millones de personas mayores en todo el mundo, y un problema que merece la atención de todos en nuestra comunidad.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las tasas de prevalencia o estimaciones solo existen en determinados países desarrollados, que oscilan entre el 1 y el 10 por ciento. De todas maneras, se estima que las cifras no representan fielmente la realidad dado que muy rara vez es denunciada.
El abuso en cifras:
- 1 de cada 6 adultos mayores en todo el mundo ha sufrido abusos durante el último año (OMS, 2018).
- El abuso de ancianos es común. Pero solo se informa el 4% del abuso de personas mayores
- El 90% de todos los abusadores son miembros de la familia.
- La mayoría de los abusadores son hijos adultos, cónyuges y parejas. Además, los proveedores de atención médica.
- También puede suceder en instituciones (hogares de ancianos, centros de atención a largo plazo)
Formas de abuso
Abuso físico
Es abuso físico si alguien golpea a un adulto mayor o maneja a la persona con rudeza, incluso si no hay lesiones. Darle a una persona demasiada o muy poca medicación, o restringir físicamente a una persona, también son formas de abuso físico.
Abuso sexual
Es abuso sexual si alguien obliga a un adulto mayor a participar en una actividad sexual. Esto puede incluir comportamiento verbal o sugerente, no respetar la privacidad personal, el contacto sexual o el sexo sin el consentimiento de la persona.
Abuso emocional
Es abuso emocional si alguien amenaza, insulta, intimida o humilla a un adulto mayor, trata a la persona como a un niño o no le permite ver a su familia y amigos. El abuso emocional puede devastar el sentido de identidad, dignidad, y/o autoestima de una persona.
Abuso financiero
Es abuso financiero si alguien engaña, amenaza o persuade a los adultos mayores de su dinero, propiedad o posesiones. El uso indebido de un poder notarial (power of attorney en inglés) es una forma común de abuso financiero.
Violación de derechos y libertades
Es una violación de los derechos y libertades si alguien interfiere con la capacidad de un adulto mayor para tomar decisiones, especialmente cuando esas decisiones están protegidas por la ley. Los ejemplos incluyen interferir con prácticas o tradiciones espirituales; retención de correo o información; negar la privacidad; prevenir visitantes; dictar cómo alguien más puede gastar su propio dinero; o mantener a alguien en una institución sin una razón legítima.
Negligencia
Es negligencia si alguien no proporciona las necesidades de la vida, como comida, ropa, un refugio seguro, atención médica, cuidado personal y la supervisión necesaria. La negligencia puede ser intencional o involuntaria. A veces, las personas que brindan atención no tienen los conocimientos, la experiencia o la capacidad necesarios.
Abuso sistémico
El abuso sistémico (también llamado abuso institucional) se refiere a reglas, regulaciones, políticas o prácticas sociales que dañan o discriminan a los adultos mayores. El abuso sistémico incluye reglas que se desarrollan con un propósito aparentemente neutral, pero que lastiman a la persona. Los ejemplos incluyen el uso de restricciones físicas como una forma fácil de prevenir caídas; o cambiarle el pañal a una persona en lugar de ayudarla a ir al baño, simplemente para ahorrar tiempo o esfuerzo. A veces, la escasez de personal puede llevar a una negligencia sistémica.
Algunas consecuencias del abuso en la salud física y mental:
- Entre el 44% y el 62% de los adultos mayores maltratados experimentan algún nivel de depresión.
- Vivir con abuso y negligencia también puede aumentar significativamente las posibilidades de la persona de enfermarse o pueden afectar a otras enfermedades problemas peores.
- Los adultos mayores abusados o abandonados tienen un 200% más de riesgo de muerte prematura El estrés de vivir en una situación de abuso acorta la vida de las personas mayores por varios años en promedio.
¿QUÉ PUEDO HACER?
- Si se encuentra en una emergencia: LLAME AL 911
- Ayuda y Consejería gratuita (Programa especializado para personas mayores) Family Service Toronto 416.595.9230 – Servicio en múltiples idiomas, incluido el español.
Soporte, líneas de ayuda y referencias
- Línea de apoyo a las víctimas 1-888-579-2888
- Línea de seguridad para personas mayores 1-866-299-1011
- Abuso de ancianos Ontario 416-916-6728
- INFOline para personas mayores 1-888-910-1999
Líneas de informes (en caso de abuso institucional)
- Línea de ACCIÓN de atención a largo plazo 1-866-434-0144
- Autoridad reguladora de las casas de retiro 1-855-2757472
Asesoramiento e información legal
- Centro de defensa para los ancianos 416-598-2656
- Oficina del tutor público y fideicomisario 1-800-366-0335
Para solicitar más información y atención gratuita con consejeras puede comunicarse en español con Family Service Toronto al
Tel. 416-595-9618 o enviar un correo a: sau@familyservicetoronto.org
*Agustina De Benedetti es Licenciada en Psicología Clínica (Argentina) y tiene una Maestría en Psicología de Consejería (Canadá). Es psicoterapeuta registrada (cualificando) en el Colegio de Psicoterapeutas Registrados de Ontario (CRPO). Actualmente, además de trabajar como terapeuta clínica, desempeña trabajo comunitario orientado a crear conciencia sobre la violencia basada en el género como parte de la campaña pública llamada Neighbours, Friends and Families (NFF) (http://www.neighboursfriendsandfamilies.ca/about/about-us).