El gobierno federal está implementando un paquete de 37.000 millones de dólares que permitirá extender el Beneficio de Respuesta de Emergencia de Canadá (CERB) por cuatro semanas (ahora estaba fijado en 24 semanas) antes de reemplazarlo por un esquema de Seguro de Empleo «simplificado» y tres nuevos programas de pago para ayudar a las personas sin trabajo durante la crisis pandémica.
Si bien los cambios en el Seguro de Empleo se pueden realizar a través de regulaciones, el gobierno de la minoría liberal deberá aprobar una legislación antes de que se pongan en práctica los nuevos programas.
Dado que el primer ministro Justin Trudeau prorrogó el Parlamento esta semana, el gobierno no tendrá la oportunidad de presentar un proyecto de ley hasta después de que pronuncie el discurso en el trono el 23 de septiembre, y solo si sobrevive a un voto de confianza posterior en la Cámara de los Comunes.
La recién nombrada ministra de Finanzas, Chrystia Freeland, ha anunciado el plan este jueves junto con Carla Qualtrough, ministra de Empleo, desarrollo de la fuerza laboral e inclusión de la discapacidad.
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El paquete de 37.000 millones extenderá el período de elegibilidad del CERB de 500 dólares por semana hasta un máximo de 28 semanas. Eso costará a las arcas públicas cerca de 8.000 millones, según altos funcionarios que informaron a los periodistas sobre los cambios el jueves.
El gobierno espera que, una vez finalizado este periodo, alrededor de 3 millones de beneficiarios del CERB se transfieran a un sistema de Seguro de Empleo modificado que estará vigente durante un año.
El nuevo esquema está programado para comenzar el 27 de septiembre y pagará un mínimo de 400 dólares por semana durante al menos 26 semanas. Los canadienses son elegibles si trabajaron al menos 120 horas el año anterior y no pueden encontrar trabajo.