Esta semana, específicamente el 7 de junio, se lleva a cabo una elección general para votar por nuestro próximo o próxima premier de Ontario. La votación anticipada se realizó desde el 26 hasta el 30 de mayo pasado. La opción de voto anticipado es para las personas que no estarán disponibles para votar el 7 de junio, o para las personas que están ansiosas y desean cumplir con su deber cívico. Entiendo que muchas personas disfrutan votar el día de la elección y ven éste como un día nacional de acción y orgullo.
Hace poco le pregunté a un amigo, cuya opinión sobre política valoro mucho, si ya había votado. Sé que saldrá del país justo el 7 de junio. Muy orgulloso de sí mismo, respondió que sí, que había votado el lunes anterior. Confundida, le pregunté cómo podría haber votado el lunes si las votaciones anticipadas no se habían programado sino hasta este sábado pasado. Fue entonces cuando me di cuenta de que quería decir que ya había votado en el consulado de su país de origen cuando estaban celebrando elecciones presidenciales.
He visto muchas publicaciones en redes sociales relacionadas con expatriados en Canadá que votan en las elecciones de sus países de nacionalidad anterior desde dentro de Canadá. Algunos países de América Latina han tenido elecciones recientemente. También vi mucha discusión política sobre las elecciones en esos países. Sin embargo, no veo muchos mensajes de ciudadanos canadienses naturalizados sobre la votación en las elecciones de Ontario ni sobre el debate que tuvo lugar el 27 de mayo entre los líderes del Partido Liberal, Conservadores y del NDP en Ontario.
Es un gran honor para las personas que dejaron sus países de origen hace muchos años poder votar en los procesos electorales en dichos países desde Canadá. Pero ese honor es tan bueno como ser parte de la política en Canadá.
Lo que me pareció extraño en el caso de mi amigo fue que estaba votando por un presidente en un país en el que no había residido durante más de 20 años, y que todavía sigue involucrado en la política de su país de origen y en el trabajo de solidaridad. Yo no digo que no deba hacerlo, pero ¿por qué no hacer lo mismo con Canadá? Él ha estado en Canadá por más de 20 años y es ciudadano canadiense. ¿Por qué votar en Canadá y en la política canadiense no es tan importante para él? ¿Es nuestro falso sentido de seguridad en Canadá de que todo estará bien sin importar quién sea elegido? ¿Es porque Canadá es un país construido por inmigrantes y creemos que todo estará siempre bien?
Fue este mismo tipo de pensamiento lo que afectó a los EE UU en las últimas elecciones. Es este mismo tipo de pensamiento el que ahora está perjudicando a tantos latinoamericanos en los Estados Unidos. Si la comunidad latinoamericana en los EE UU se hubiera dado cuenta de la importancia del compromiso político, tal vez las cosas no hubieran resultado como sucedieron.
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Según el Censo de los EE UU de 2016, la población hispana en dicho país, en 2015, fue de 56,6 millones. ¿Te imaginas si hubieran ejercido su derecho al voto y su participación en la política?
La elección en Ontario este 7 de junio determina quién es el o la premier de Ontario. Y son las decisiones tomadas por nuestros funcionarios electos las que tendrán un efecto directo en nuestras vidas, en nuestras ciudades, en nuestras provincias y en nuestro país, y, por tanto, deberíamos preocuparnos por quién nos gobernará.
El premier de Ontario juega un papel importante. Como Jefe del Gobierno de la provincia, el premier tiene varios roles y poder. El nombramiento del premier lo realiza el vicegobernador de Ontario y preside el Consejo Ejecutivo o el gabinete.
La Oficina del Premier de Ontario, o primer ministro de Ontario, incluye una serie de comités: Comité de Prioridades y Planificación; Comité del Gabinete sobre Gestión de Emergencias; Junta del Tesoro / Junta de Administración del Gabinete; Comité de Legislación y Regulaciones; Comité de Salud, Educación y Política Social; Comité de Empleo y Política Económica. Mucho está en juego dependiendo de cuál de los tres partidos principales asume el papel de premier de Ontario. Todos los temas que se discuten son importantes, pero de particular interés para los hogares latinoamericanos son los de empleos, salario mínimo, cuidado de la salud y cuidado de niños.
Incluso las políticas migratorias se verán afectada por quién sea nuestro próximo primer ministro de Ontario. Es importante que los inmigrantes sepan que Ontario tiene la Ley de Inmigración de Ontario de 2015, que entró en vigor el 1 de enero de 2018. La ley proporciona la legislación para: Registro de empleadores y reclutadores de Ontario elegibles para realizar ofertas de trabajo y proporcionar servicios de reclutamiento respectivamente a ciudadanos extranjeros; Creación de programas de asentamiento e integración; Creación y regulación del programa de selección relacionado con la inmigración temporal y permanente en la provincia; Inspecciones, investigaciones, delitos y sanciones administrativas y de otro tipo.
La ley es un intento del Gobierno de Ontario para hacer de la provincia un destino atractivo para trabajadores calificados, empresarios y otros inmigrantes talentosos de todo el mundo.
Ontario ha recibido más de 100.000 inmigrantes cada año y la ley reconoce que Ontario es un destino importante para los inmigrantes.
Las elecciones del 7 de junio tienen un impacto en muchas cosas, una de las cuales será La Ley de Inmigración de Ontario. Sólo por esta razón, es importante que los miembros de la comunidad latinoamericana de Ontario participen en la política de la provincia y voten en las elecciones provinciales. Muchos de nosotros tenemos familiares y amigos que querrán inmigrar a Canadá y se verán afectados.
Según el Censo de Ontario de 2016, en la provincia viven 195.950 personas de origen latinoamericano. Y el número ha aumentado desde 2016. Como comunidad, tenemos una gran voz, y nuestra voz puede hacer una diferencia importante en quién es elegido premier de Ontario, lo que a su vez marcará una gran diferencia en la forma en que se trata a los inmigrantes en la provincia. También afectará no sólo las vidas de los latinoamericanos naturalizados en Ontario, sino que también a los futuros solicitantes de inmigración a Ontario.
Estar involucrados en la política de nuestros queridos antiguos países de nacionalidad es importante y maravilloso. Pero también debemos estar involucrados en la política de nuestro amado país de origen adoptivo, Canadá. Hagamos que las voces de la comunidad latinoamericana en Ontario cuenten. El 7 de junio, salga y ejercite el derecho que se ha ganado para votar.
