Ilse Treurnicht, CEO de MaRS hasta 2017, y destacada miembro del consejo consultivo del ministro de finanzas canadiense, Bill Morneau, ha señalado en las últimas horas que “Canadá debe ser más estratégico a la hora de atraer inversión extranjera para impulsar sus propias empresas”. En esta línea ha indicado que la inmigración es una vía de gran utilidad y eficacia para atraer inversión extranjera, lo que redunda directamente en la economía del país. MaRS Discovery District es una corporación sin ánimo de lucro fundada en Toronto en 2000 con el objetivo de comercializar la investigación médica y otras tecnologías financiadas con fondos públicos y capital privado. En su seno incuban decenas de startups vinculadas con el ámbito de la salud.
Treurnicht recuerda que el Consejo ha recomendado recientemente la creación de un centro de inversión extranjera para atraer inversiones directas, que debería estar plenamente operativo para 2017 con una plantilla de ventas a tiempo completo. El gobierno dedicará 18 millones de dólares en los próximos cinco años a esta oficina.
En el último informe del Consejo emitido en octubre (de los muchos que este órgano consultivo e independiente emite a lo largo del año) se detallan tres áreas específicas de trabajo: el apoyo a las infraestructuras canadiense con un banco de infraestructuras que destinará 200 mil millones de dólares para proyectos de obra pública en los próximos 10 años. Uno de los objetivos de este ambicioso plan es atraer más inversión extranjera e incrementar el número de inmigrantes a 450.000 por año durante los próximos cinco años. «Canadá tiene un déficit de infraestructuras muy importante; algunos consideran que la inversión necesaria para corregir ese déficit se acerca a un trillón de dólares, muchos lo establecen en más de 680 mil millones de dólares«, dijo Treurnicht.
Sobre a la ambiciosa meta del Consejo de atraer a más inmigrantes (el ministro de Inmigración de Canadá, John McCallum, dijo que el número puede ser demasiado ambicioso), Treurnicht indicó que este impulso está siendo promovido en gran medida por la comunidad tecnológica, que tiene clara la prioridad en la necesidad de atraer talento global. La asesora ministerial señaló que la recientemente anunciada Estrategia Global de Competencias, que incluye un proceso más rápido para la concesión de visas y permisos de trabajo de corta duración, es una señal muy positiva. «El gobierno ha escuchado fuerte y claro de la comunidad tecnológica que los retrasos en la atracción de talento ejecutivo de alto nivel en las empresas que están creciendo es un serio problema. Así que tiene que haber una racionalización de esos procesos«, defendió.
En este sentido aseguró que «habrá recomendaciones adicionales en torno a una mayor racionalización del flujo de procesamiento de talento. Somos optimistas porque vemos que ya ha habido acciones influídas por nuestras recomendaciones«, dijo Treurnicht.
Treurnicht valoró algunas de las cuestiones que el consejo sigue examinando en el último trimestre de 2016, como los desafíos que enfrentan las empresas en proceso de escalamiento y si los actuales programas de innovación de Canadá son eficaces para adaptar a los trabajadores a un futuro dominado por la automatización. El consejo también está examinando vías para alentar el crecimiento inclusivo, y el apoyo a las personas pertenecientes a minorías étnicas para que puedan integrarse en el mercado de trabajo.