La División de Protección al Refugiado reinició las audiencias presenciales

Todos los solicitantes de refugio que están en el país deben tener la documentación lista

Photo: Bill Oxford at Unsplash

Tras más de cinco meses de haber sido cerradas debido a la emergencia del COVID-19, esta semana se están abriendo nuevamente las audiencias presenciales de la División de Protección al Refugiado y es importante conocer que hay todo un procedimiento que se debe seguir justamente para evitar la infección.

La División de Protección al Refugiado está enviando notificaciones para que los solicitantes de refugio se presenten a las audiencias y en esa misma comunicación envían también una hoja con los procedimientos a seguir. En esta, les están pidiendo no llegar con toda la familia (los hijos menores de 18 años no tienen que presentarse), deben llegar por lo menos media hora antes ya que va a haber todo un proceso de declarar el estado de salud de los participantes. Y si el solicitante no se siente cómodo haciendo su audiencia presencial puede objetarla, así como también lo puede hacer el consultor o abogado que le representa, y los casos van a ser pospuestos. Es interesante la forma en que se va a proceder en estas audiencias. Todas las personas deben usar máscaras y también va a haber protectores de plástico para cada individuo.

La semana pasada estuve en una reunión con la División de Protección al Refugiado en la que explicaron todos estos procedimientos. Una de las preguntas que hice fue si no consideraban que pudiera haber un problema de comunicación ya que la mayoría de solicitantes se comunican a través de intérpretes: si los solicitantes de refugio van a tener máscara, al igual que los intérpretes , a veces la comunicación se dificulta por los distintos acentos que tienen las personas a pesar de que hablan el mismo idioma.

La respuesta que me dio uno de los representantes de la División fue que ellos han hecho bastantes pruebas con distintos grupos y que no han detectado que haya algún tipo de problema en relación con la comunicación. Pero es una preocupación, porque el solicitante se comunica por medio del interprete y si entre ellos no se pueden comunicar bien pueden perjudicar el caso. Hay que esperar a ver como funciona el nuevo sistema y en caso de que haya problemas de comunicación por el hecho de que se esté usando máscaras, siempre se puede pedir una revisión judicial ante la Corte Federal.

Otra vía que la División de Protección al Refugiado está usando para agilizar los procesos es que los solicitantes de refugio voluntariamente hagan su audiencia de manera virtual. Están enviando a algunas personas una notificación diciéndoles que si están de acuerdo en hacer su audiencia de forma virtual deben firmar un documento y enviarlo. Les explican que como va a funcionar la audiencia es que el solicitante va a estar en su casa y su asesor en su oficina, o ambos en la oficina del asesor, y el intérprete y el miembro de la Junta de Refugio estarían en las oficinas del Immigration and Refugee Board of Canada (IRB).

Pero esta opción es totalmente voluntaria. Si la persona no quiere participar puede simplemente no firmar el documento que le envíen y va a quedar en la lista para hacer una audiencia en persona.

Otra cosa que se está haciendo es aceptar casos de los países que producen refugiados, es decir de los países donde hay muchos problemas, sin tener una audiencia, simplemente revisando la narrativa y la documentación que corrobora que la persona en realidad estaría en peligro si es regresada a su país de origen.

Muchos casos de países del Oriente Medio y por ahora de Venezuela se están procesando de esta forma, en base a documentos y sin audiencia.

Un consejo que quiero dar a raíz de la reunión que tuve la semana pasada con la Division de Protección al Refugiado es que todos los solicitantes de refugio deben estar preparados. Porque, por ejemplo, yo tenía la idea de que los solicitantes de refugio que llegaron primero iban a ser las personas a quienes se les iba a programar una audiencia primero. Pero resulta que a muchas personas que llegaron en diciembre del año pasado y en enero de este año ya las están llamando para sus audiencias. No necesariamente quienes llegaron primero van a tener antes sus audiencias en este reinicio.

Todos los solicitantes de refugio que están en el país deben tener la documentación lista, lo que significa revisar la historia con su asesor y ver cuales son los documentos que va a necesitar para probar su caso. Por ejemplo, si ha dicho que era un estudiante universitario y que se recibió de ingeniero, debe tener pruebas de que se recibió de ingeniero; si dijo que era un activista estudiantil, debe tener pruebas de que efectivamente fue un activista estudiantil, como por ejemplo un carnet de membresía o una carta de un representante de la organización, etc.

El punto es que sobre cada cosa que se dijo, cuanta más documentación se pueda tener, mejor. Y hay que hacer traducir la documentación al inglés o francés, hay que asegurarse de que no contradiga la narrativa que se mandó o que se va a enviar a la División de Protección al Refugiado. Y hay que enviar esta documentas cuanto antes.

Porque en la reunión de la semana pasada dijeron que, si tienen toda la documentación, entonces pueden agilizar los procesos y pueden también proponerlos para que sean analizados por el comité que está revisando los casos menos complejos, que son en realidad los casos que no van a tener audiencia o que pueden tener una audiencia super corta solamente para que el miembro del IRB quede satisfecho de la credibilidad de la persona.

Así, cuanto más pronto se envíe la documentación son mejores las posibilidades que tiene la persona de tener su audiencia o de tener una decisión sin audiencia. Obviamente si no va a haber audiencia, la decisión tiene que ser positiva, porque si se rechaza un caso las reglas de justicia indican que a la persona se le debe dar la oportunidad de presentar su caso y de aclarar las dudas que tenga quien está tomando la decisión.

Lo que la División de Protección al Refugiado está haciendo con todas estas nuevas medidas es agilizar los casos virtuales, los casos sin audiencia y los con audiencia corta, con la idea de poder eliminar la acumulación de casos que tiene. Esta acumulación ya existía antes de la pandemia, y ahora obviamente se ha incrementado aún más.

Hay que recordar que hace relativamente poco se creó un programa especial para los solicitantes de refugio que han estado trabajando en el sistema de salud, ya sea como enfermeros, personal de limpieza, etc., y eso también va a reducir el número de solicitantes de refugio que está en el inventario atrasado de casos.

El problema es que en realidad no sabemos si estas nuevas medidas van a funcionar o no. Tampoco si vamos a tener una segunda oleada de infecciones y la División de Protección al Refugiado va a tener que cancelar de nuevo las audiencias presenciales. Eso obviamente complicaría las cosas mucho más pero yo la verdad creo que la realización de las audiencias de forma virtual llegó para quedarse y que, si tuvieran que cerrar de nuevo las oficinas de la División de Protección al Refugiado y por tanto se tuvieran que cancelar las audiencias presenciales, creería que éstas se seguirían haciendo de forma virtual y ya no como una opción voluntaria.

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Vilma Filici
filici.com
Vilma Filici, presidenta de Filici Immigration Services, es profesora de leyes de inmigración y refugio en Seneca College Toronto, y asesora en materia de inmigración para diversas organizaciones comunitarias. Escribe sobre asuntos migratorios en varios medios hispanos de Toronto y es fuente de información para, entre otros, los diarios Toronto Star y Toronto Sun, y las emisoras Radio Canadá y CBC.