Emociones básicas que nos ayudarán a entender mejor el mundo

Los desafíos de llegar a un nuevo país, como Canadá, se manifiestan de muchas maneras. El miedo, la inseguridad, el desarraigo y las expectativas que generamos influyen en la manera en la que afrontamos nuestra nueva vida. Nuestras actuaciones de la vida diaria están influenciadas por estas emociones.

emociones básicas
Nuestras actuaciones de la vida diaria están influenciadas por estas emociones y la manera como ellas intervienen en el comportamiento.

Cuando se llega a un nuevo país como Canadá, donde cada persona quiere tener nuevas posibilidades, retos y aspiraciones, es uno de los momentos donde necesitamos aprender a vivir y conocer nuestras emociones básicas que son el primer canal de comunicación con el mundo exterior y nos facilitan la supervivencia y la adaptación.

Por tal razón ellas en si no son negativas, son solo funcionales. A largo plazo si estas emociones básicas desde la infancia no fueron bien desarrolladas, se reprimieron, o no se trabajaron de forma adecuada, puede transformarse en lo que se llama una emoción secundaria que se caracteriza por ser una emoción con una connotación patológica o negativa. ¿Pero, por qué ellas parecen en ocasiones tan negativas?

Para dar respuesta y entender mejor el anterior interrogante explicaré qué las causa (activa), para que nos sirve cada una (función adaptativa), como se manifiestan (conductual) y su manifestación cuando no fue elaborada (emoción secundaria).

Emociones Primarias:

Ira: se activa en situaciones donde se percibe que nuestra integridad humana se ve vulnerada con injusticias, frustración o la agresión. Por tanto, la función adaptativa es permitirle a la persona expresar al mundo sus límites, aquellos límites que el otro no debe traspasar, la defensa de los propios valores, la defensa de la integridad emocional y hasta física. Y a nivel conductual se manifiesta con un tono de voz alto, gritos o ataque. Si esta emoción no se elaborada apropiadamente se puede transformar en una emoción secundaria como el rencor/odio.

Tristeza: se activa en situaciones de pérdidas/duelos o donde la persona percibe que está en riesgo de ser separada de algo de valor para su vida. Por tanto, la función adaptativa es permitirle a la persona expresar el adiós (despedida), es un mecanismo de defensa para elaborar el estrés ante una pérdida o separación, también facilita la unión con el otro, ya que ante esta expresión emocional comunicamos necesidad de ayuda, y movemos en el otro ese sentimiento. Y a nivel conductual se manifiesta con llanto, congoja y súplica. Si esta emoción no se elaborada apropiadamente se puede transformar en una emoción secundaria llamada depresión.

Miedo: se activa en situaciones donde se percibe peligro o se está ante un evento que no es familiar. Por tanto, la función adaptativa es permitirle a la persona darse cuenta de que puede estar en situación de amenaza, para que se proteja y tome la decisión de huida/escape o luchar. Y a nivel conductual se manifiesta con gritos, evitación, y a nivel fisiológico con sudoración, temblor. Si esta emoción no se elaborada apropiadamente se puede transformar en una emoción secundaria llamada ansiedad.

Alegría: se activa en situaciones donde se ha obtenido un logro o llegado a la meta, donde los objetivos se han cumplido o cuando se siente autorrealización. Por tanto, la función adaptativa es el bienestar emocional, lograr la armonía, la búsqueda de emociones de placer y extensión de la misma vida. Y a nivel conductual se manifiesta con la sonrisa, cantar, gritar o llorar de emoción. Si esta emoción no se elaborada apropiadamente se puede transformar en una emoción secundaria llamada euforia (alegría exagerada o irreal).

Apego/Amor: se activa en situaciones donde se requiere cercanía. Por tanto, la función adaptativa es la procreación, permite unión afectiva, laxos filiales. Y a nivel conductual se manifiesta con búsqueda del contacto físico y emocional con el otro, las expresiones de compasión y calidez, sentir al otro parte de la vida. Si esta emoción no se elaborada apropiadamente se puede transformar en una emoción secundaria llamada dependencia.

Nuestras actuaciones de la vida diaria están influenciadas por estas emociones y la manera como ellas intervienen en el comportamiento, sea de forma positiva o negativa es donde debemos aprender a reconocerlas, canalizarlas y usarlas de manera consiente para lograr mejores resultados en la relación con los demás.


* Rubiel Chica es un psicoterapeuta registrado en Ontario, conferencista, investigador y tallerista. Es miembro del Colegio de Psicoterapeutas de Ontario y del Colegio de Trabajadores Sociales de Ontario. www.fenixhealingcentre.com


Referencias bibliográficas:

  • Ekman, P. (1992). An argument for basic emotions. Cognition and Emotion, 6(3/4): 169-200.
Compartir: