Las universidades canadienses preparan mejor a los estudiantes para el mercado laboral

Un informe destaca que las universidades canadienses están recurriendo cada vez más a programas cooperativos integrados en el trabajo para reforzar los currículos y las habilidades de los estudiantes antes de graduarse e incorporarse al mercado laboral.

La Universidad de Toronto es la mejor universidad canadiense en la formación de estudiantes para acceder con mayores probabilidades de éxito al mercado laboral.

Los títulos expedidos por las universidades canadienses siguen estando entre los más valorados en todo el mundo, según el Ranking de Empleabilidad Universitaria Mundial de Times Higher Education elaborado para 2017, que encuestó a 6.000 empresas a nivel mundial con una pregunta muy precisa: qué universidades produjeron los «mejores graduados en términos de empleabilidad» en sus propios países y en el extranjero.

Cinco universidades canadienses figuran entre los 100 principales en esta tabla: la Universidad de Toronto, McGill y la Universidad de Montreal / HEC, ocuparon el puesto 13, 18 y 44 respectivamente, mientras que la Universidad de Columbia Británica ocupa el 45 y McMaster el 74.

Los resultados sugieren que las universidades canadienses están capacitando a los estudiantes de pregrado con las habilidades que necesitan las empresas; es decir, les están preparando mejor para el mercado laboral más allá de los conocimientos que están adquiriendo en las aulas. Esto es más relevante en áreas como negocios, informática e ingeniería, que representan el 80 % de los sectores de la industria encuestados.

«Hemos intentado enfocarnos más en las competencias básicas junto con los temas de aprendizaje que están estudiando», ha señalado a The Globe and Mail Meric Gertler, presidente de la Universidad de Toronto. «Nos aseguramos de que se comuniquen bien, de que tengan la oportunidad de trabajar en equipo. Esos esfuerzos están dando sus frutos».

La Universidad de Toronto es una de las siete universidades que están fomentando la resolución de problemas de los estudiantes, la comunicación y las habilidades de pensamiento crítico a lo largo de su educación con la esperanza de escalar los resultados a otras instituciones. Los rigurosos estándares también pueden ser parte de la explicación de la aparición de la Universidad de Toronto en un lugar tan elevado en el ranking, sostiene Meric Gertler y añadió que «aunque nuestros estudiantes no siempre lo aprecian, parece que los empleadores sí lo hacen”.

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Los resultados contrastan con la caída en la reputación que las universidades británicas han sufrido este año. En una caída impactante, Oxford bajó ocho puntos hasta al puesto 15. ¿A qué se debe esta debacle? Según los expertos, los graduados británicos pueden carecer de las habilidades técnicas que los empleadores valoran porque las universidades británicas insisten en que su trabajo es producir graduados que sean «completos», sostiene Simon Baker,  editor de datos de Times Higher Education.

«Las universidades en el Reino Unido argumentan que eso es exactamente lo que quieren los empleadores. Quieren gente que tenga habilidades transferibles, pero hasta cierto punto es por eso que el Reino Unido no lo hace tan bien en este ranking», argumenta. Por el contrario, las universidades en Francia y Alemania integran las necesidades del empleador e incluso el plan de estudios del empleador en el aula. Esta conexión entre la formación del estudiante y el mercado laboral al que espera acceder ha reforzado los modelos implantados en las universidades canadienses. «Países como Canadá y Francia se enfocan más en la empleabilidad y se aseguran de preparar a los graduados para su etapa como trabajadores fuera de la universidad», dijo Baker.

Las universidades canadienses también recurren cada vez más a programas cooperativos integrados en el trabajo para reforzar los currículos y las habilidades de los estudiantes antes de graduarse. Las clasificaciones de altos empleadores validan ese enfoque, dijo UBC en un comunicado. Las universidades estadounidenses tuvieron el mejor rendimiento en general, aunque las universidades de Princeton, Yale y Stanford cayeron. La positiva actuación de Canadá es una buena noticia para las universidades de este país, que recientemente han experimentado algunas caídas en los rankings que se centran en la reputación académica, el impacto de la investigación y la calidad de la enseñanza. El mundo universitario canadiense viene reclamando desde hace tiempo una mayor inversión pública en docencia e investigación para reforzar la competitividad global de sus facultades. Los fondos de investigación contribuyen directamente a una experiencia educativa intensiva que prepara a los estudiantes para el trabajo, dijo el presidente de U of T.

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