Nadie puede negar que Toronto es una de las ciudades más cinéfilas del mundo. No sólo porque en sus calles se ruedan decenas de películas al año. O por el afamado Festival Internacional de Cine de Toronto.
El título de ciudad cinéfila proviene de decenas de otros festivales de cine que cada año se suceden en la principal ciudad canadiense, sostenidos por el insaciable apetito de los habitantes de Toronto por ver cine más allá de lo que Hollywood tiene que ofrecer.
En estos momentos se está celebrando en Toronto el festival Inside Out, especializado en la proyección de películas hechas por y sobre lesbianas, homosexuales, bisexuales y transexuales.
Inside Out exhibe tres películas llegadas de países latinoamericanos.
Sacarme a pasear, de la ecuatoriana Micaela Rueda narra la homofobia que una adolescente, Sara, sufre en su escuela mientras busca el amor de su vida.
Esteros es una coproducción entre Argentina y Brasil dirigida por Papu Curotto que realiza su estreno mundial en Inside Out. El film se centra en dos amigos de infancia, Matías y Jerónimo, que se reencuentran como adultos.
El tercer largometraje latinoamericano es el brasileño O Ninho, de los directores Filipe Matzembacher y Marcio Reolon. El film está presentado en cuatro episodios que narran el encuentro de un joven soldado, Bruno, con un inusitado grupo de homosexuales en la ciudad de Porto Alegre.
